MATÍAS COSTA: "CARTOGRAFÍA ÍNTIMA"
Del 21 de Septiembre al 22 de Octubre de 2011
En esta exposición en AJG Contemporary Art Gallery, Matías Costa plantea la reconstrucción de un mapa fragmentado por la memoria y el desarraigo. En un naufragio intencionado, el autor camina en busca de piezas dispersas geográfica y temporalmente, que se vinculan para formar una travesía por los recuerdos y los sueños. Las imágenes que construye Costa funcionan como nudos de una red que une lugares y tiempos distantes entre si, pero que forman parte de un mismo universo y comparten una atmósfera común. En esta particular cartografía, un joven chino inmóvil en un lago de Pekín en 2006 es la puerta de acceso a un parque de Buenos Aires en 2010, que a su vez conecta con un bosque ucraniano de finales del siglo XIX.
El recorrido de esta exposición no describe lugares ni acontecimientos, sino que ahonda, de un modo menos exacto pero más agudo, en la naturaleza atmosférica de la memoria. Imágenes que aportan dudas e incertidumbres, desde una lírica introspectiva, que generan inquietud y evocan otras imágenes más íntimas y remotas.
Antonio Jimenez,
Sevilla, Septiembre 2011
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Extraviados
Matías Costa asume un trabajo creativo que pone en riesgo su cuerpo emocional, la coherencia, la continuidad, el discurso de la identidad propia. Es precisamente en la pérdida de nortes, en lo incierto, donde encuentra un agujero de salida para sus trabajos: especies de estudios de campo de realidades dadas en la dificultad, el vacío o el infortunio. Costa no ha sabido salir de estas circunstancias hasta tocar los bordes de la confusión. Se lleva a sí mismo al extremo de verse cámara en mano sin saber a qué, cuándo, cómo y porqué disparar. En tal descarrío surgen los contenidos atmosféricos, las sugerencias, los silencios concretos de sus fotografías. Se trata –tal vez– de respirar el aire más denso, penumbroso o retirado, de los contextos que investiga. Y capturarlo.
Parece existir en este fotógrafo la necesidad de alcanzar un punto cero para remontar el lomo de sus temas. A saber: el desarraigo, la trashumancia cultural, las migraciones actuales o del pasado reciente, la imposibilidad de un destino definitivo o de una pertenencia inequívoca, la identidad erigida sobre lo fragmentario y disperso, las readaptaciones, la pérdida, la fragilidad de todo lo alcanzado, la extrañeza, la memoria, la vida y la muerte, el no futuro.
Así, Costa se ha entregado a una especie de arqueología de la memoria humana. Sus fotografías inéditas son reconocidas por coincidir con la materia de los recuerdos y las impresiones. Es quizá ese uno de los mayores argumentos de sus imágenes. Los ojos que las contemplan desconocen esos lugares puntuales o esos personajes que los habitan o transitan, pero los descubren de algún modo entrañables.
El cuerpo de esta exhibición que nos ocupa es un repaso por inquietudes sustanciales del artista y una interesante presentación de sí mismo como creador a través de estampas de distintas series de su trabajo. Estampas que reafirman: Matías Costa sabe que la memoria es una práctica de sobrevivencia psíquica, que en mitad del extravío existencial queremos hacernos unitarios a partir de trozos y que de la habilidad para armar un sentido depende nuestra exitosa negociación con la locura.
Edgar Alfonzo Sierra
PIEZAS DE LA EXPOSICIÓN: